El inicio del año es una época perfecta para comenzar a organizar nuestras finanzas y la mejor manera de hacerlo es elaborando un presupuesto familiar.
El presupuesto familiar es una estimación de los gastos y recursos necesarios para cumplir los distintos objetivos familiares que te has propuesto. El cómo hacerlo o implementarlo es muy importante ya que te posibilita organizar, ahorrar y mejorar la finanzas de la familia.
El principal objetivo de elaborar un presupuesto familiar, es tener un mayor control de nuestros egresos, procurando siempre que la diferencia entre los ingresos y egresos, sea la mayor posible.
1- Recopila los estados de cuenta de tarjetas de crédito, recibos de todo lo que compras con efectivo, cheque o tarjeta de débito.
2- Enumerar todos los gastos mensuales que realizas regularmente.
3- Empieza por anotar los gastos fijos como pagos que vencen en una fecha específica o que se hacen regularmente, tales como: alquiler o hipoteca, deudas con los bancos, préstamos personales, seguros, pagos de pensiones del colegio, impuestos, etc.
4- Continúa con los gastos variables, como pasajes de transporte público, gasolina, reparaciones del vehículo, almuerzos, paseos, servicios de electricidad, agua, celular, teléfono, tarjetas de crédito, necesidades personales (peluquería, artículos de aseo), medicinas, entre otros.
5- Una vez que tenga claramente definidos tus gastos, empieza a detallar tus ingresos familiares regulares, no los extras. Si no tiene un monto exacto, efectúe un estimado, pero en un escenario pesimista.
6- Define cuáles son tus gastos prioritarios, los que no puede dejar de realizar y los que si puede postergar o suprimir.
7- Fíjate una meta de ahorro o equilibrio. Para ello apunta los gastos que no efectuarás o los que reducirás. Si a pesar de reducir gastos, estos siguen siendo mayores a sus ingresos, vea la opción de refinanciar sus deudas.
8- La disciplina es clave de un presupuesto equilibrado, por lo que te recomendamos que revises cada semana cómo vas en el cumplimiento de tu presupuesto. A final de mes evalúa el resultado y repita el ejercicio, incorporando los gastos que no consideraste inicialmente.
Nunca se es lo suficientemente pequeño para aprender acerca de administración del dinero. Desde aquella cantidad semanal que damos a NUESTROS HIJOS, hasta la que damos cuando ya son más grandes, representan bienes que hay que enseñarles a cuidar.
Cuando realizamos el presupuesto familiar debemos invitar a los menores a que observen qué es lo que estamos haciendo y para qué, de esa manera aprenderán con el ejemplo el hábito del ahorro.