No es porque se vean bonitas y complemente la decoración del hogar, con este espacio les enseñamos a organizarse y respetar la intimidad.
La presencia de los niños llena el hogar de punta a punta, ellos suelen dejar su huella como lo hacen los tornados: marcas de crayones, floreros rotos y el uniforme escolar tirado en el sofá de la sala, que mamá recoge una y otra vez. El orden siempre es positivo, pero los peques necesitan ver el mundo “con las manos”, de ahí que sea tan importante tener un espacio solo para niños en el hogar.
La habitación infantil es el rincón de la casa dedicado exclusivamente a los peques. Es su mundo, la zona en la que ellos tienen libertad para crear el entorno que les sea más agradable, claro, con la ayuda de papá y mamá.
El cuarto para niños debe ser una estancia divertida, abierta a la creatividad, en la que el chiquito se exprese tal cual es. Poco a poco puedes enseñarle a sentirse responsable del orden e higiene de esta área. No recojas lo que él/ella tire, motívalo a tener un lugar para cada cosa y cada cosa en su lugar.
Si le creas un zona especial, será más fácil exigirle que cumpla con las normas de comportamiento de las otras estancias del hogar, pues si quiere jugar con sus amiguitos, hacer la tarea o cambiarse de ropa tiene en su habitación el sitio adecuado para hacerlo.
Con la higiene debes ser firme: ¡Nada de comer o beber en el cuarto! Los restos de comida atraen insectos, además generan mal olor. Si ocurren derrames, con las toallitas húmedas Huggies limpias en un dos por tres las diversas superficies del cuarto y las manitos de tu chiquito. Ahora con más razón, busca las presentaciones de 64 y 72 unidades de las toallitas húmedas Huggies, en cada compra ahorras hasta un 11 por ciento.
El respeto a los espacios y la intimidad es de doble vía, antes de entrar a su cuarto toca y pide permiso.