Debemos enseñar a nuestros hijos como tratar a los demás con respeto, amabilidad y a comunicar con sentimientos.
Pero debemos tener claro que en medio de uno de sus berrinches no es el momento adecuado. Y que debemos respetarlos a ellos también.
Perder la paciencia no es lo mismo que perder los estribos
En el momento del berrinche el cerebro del niño se pone en modo “supervivencia” por decirlo así y el tuyo también, esto significa que no piensan racionalmente y pueden lastimarse uno al otro con respuestas hirientes.
¿Cómo reaccionar ante un berrinche?
Con uno de estos 7 tips lograran calmarse y no faltarse el respeto:
Mantén la calma: Sabemos que no es fácil mantener la calma si tu hijo está siendo grosero contigo o alguien más. Toma una respiración profunda por algunos segundos y piensa que esto no es una emergencia.
Interpreta su comportamiento: Trata de mirar las cosas desde la perspectiva de tu hijo. Qué será que está sintiendo que no puede expresar.
Empatiza: Ayuda a tu hijo a identificar sus sentimientos. Puedes decirles cosas con afinidad, “Que mal es tener que irnos cuando la estamos pasando tan bien verdad?”
Desarrolla el Control Emocional en tus Hijos
Busca la raíz del problema: Puede ser que hace un tiempo tu hijo no haya comida y tenga la azúcar baja, tenga sed o sueño, esto los hace muy sensibles.
Pausa: Lo más probable es que el niño este hablando de una manera rápida y no se pueda entender lo que diga o que no piense antes de hablar. Por esta razón debes decirle “Me gustaría entender lo que dices pero estas hablando de una manera muy rápida, que al sí respiras un poco y luego me dices para solucionar esto”.
Niños impulsivos y fácilmente frustrados. ¿Cómo manejarlos?
Ignorar: Si sabes que tu hijo esta incomodo por hambre o sueño lo mejor es ignorar y hablar cuando estén en calma para que así puedan entenderse.
Afecto: Puede ser que tu hijo solo necesita que le des un abrazo o un beso, inténtalo!
Más de 7 maneras de expresar amor hacia tus hijos: Descúbrelas…
Que esperes hasta que tu hijo se calme no es sinónimo de que eres un padre pasivo sino que quieres que su cerebro se active de un modo en que puedan hablar los dos con sentimientos reales y no llevados por el enojo.
Artículos relacionados
10 Cosas que no debes hacer al disciplinar a tus hijos
por