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El aprendizaje comienza cuando se sabe, conoce o distingue alguna actividad física, emocional o intelectual. Todo ser humano nace con un potencial para aprender, sin embargo, sólo aquellas personas que desarrollan su potencial pueden llevar a un nivel pleno sus habilidades.

Durante la infancia, es posible aprender más fácil y rápidamente, ya que el cerebro de un niño es mucho más activo que el de un adulto. A través de su percepción auditiva, visual y sensorial, el pequeño es capaz de imprimir en su memoria las vivencias emocionales que inician el proceso del aprendizaje. Cuando estas vivencias se repiten varias veces, dan por resultado una huella en la memoria, el inicio del conocimiento.

La música es de una importancia capital para el niño, porque es la única de las Bellas Artes que afecta al ser humano desde antes de nacer. Está comprobado científicamente que el niño, en el claustro materno, reacciona al sonido desde el quinto mes de gestado. Asimismo, las emociones de la madre repercuten en su hijo.

En las primeras etapas del desarrollo y aprendizaje de nuestros hijos, la música toma un lugar muy importante, pues por medio de canciones, rimas y cuentos cantados el niño se apropia de conceptos y valores, desarrolla sus aptitudes en todas las esferas del conocimiento, así como la capacidad de socializar.

La selección adecuada de canciones para compartir con nuestros hijos es muy importante porque además de ayudar a potenciar sus destrezas, estaremos formando su sentido estético y desarrollando una relación emocional que dejará huellas en su vida futura.

En nuestra vida actual el tiempo se ha convertido en nuestro peor enemigo, pues hemos dejado de pensar en el tiempo de calidad que debemos dedicar a la familia, absorbidos por el trabajo y los compromisos.

No es la cantidad de tiempo que dedicamos a nuestros hijos lo que establecerá la diferencia, sino la calidad de ese tiempo. Compartamos con ellos ese hermoso proceso de su crecimiento y aprendizaje. Dediquemos un momento a cantar, escuchar, bailar y leer con ellos y para ellos, eligiendo música de calidad para ese especial momento.

¡Muchas bendiciones a todos!

Por: Claudia Cepeda