Las madres con bebés que requieren de mucha atención y cuidado, a menudo tienden a sentirse «gastadas.»
Para sobrellevar las demandas de un bebé que te necesita a tiempo completo, es necesario que balancees tus necesidades con las de tu hijo. Mientras te sientas bien contigo misma, las exigencias de tu bebé te parecerán menos desalentadoras. Para lograr un balance perfecto, llévate de estos pequeños pero significativos consejos:
Mantenlo simple. Concéntrate en tu bebé y en mantener tu propio estado mental en paz. La cena, fotos por organizar y llamadas que devolver, pueden esperar.
Regula y prioriza tus momentos de sueño. Toma una siesta mientras tu bebé lo hace, vete a la cama temprano junto con él o duerme hasta tarde. Pídele a tu pareja que te ayude atendiendo al bebé por la mañana en lo que tú aprovechas el sueño, o busca una persona que pueda cuidarlo durante este tiempo.
Ejercítate a diario. No, no tienes que tomar una clase de aeróbicos cada mañana o correr 5 Kilómetros el simple hecho de caminar diariamente te energizará.
Acepta la ayuda. No te encargues de todo. Los padres, abuelos y amigos, pueden marcar una gran diferencia cuando tus brazos y tu energía ya no aguantan más.
Saca tiempo para ti. Sólo 15 minutos en la bañera pueden darte la paz que necesitas para sentirse segura como madre.
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