El 42% de los menores de 11 años sufre dolores de espalda, y una de las causas principales del problema es el peso de sus mochilas.
El peso excesivo en la espalda de un esqueleto todavía inmaduro puede generar cefalea, cansancio, fatiga e incremento de malas posturas.
Consejos para comprar la mochila adecuada:
Escoge una mochila con correas acolchonadas para que la carga que recae sobre los hombros no moleste tanto.
Que tenga preferiblemente una correa en la cintura para que ayude a sujetar la carga y distribuir el peso de la mochila.
Busca que sea de un material firme para que no se hunda ni se rompa.
Debe ser ajustable para permitir que se adecúe al cuerpo del niño.
¿Qué hacer para mantener saludable la espalda de nuestros niños?
La mochila se debe usar con ambas correas. Estas deben caer sobre los músculos más fuertes de la parte media de la espalda para lograr mejor equilibrio y se debe reducir la carga.
La parte posterior acolchada, correas anchas que no compriman las axilas, correas suplementarias en pecho y cadera, y varios compartimentos para repartir el peso.
Pero debemos considerar que estas tengan mano regulable a la altura del niño y ruedas grandes para más estabilidad, para que no se produzcan lesiones de muñeca en los traslados.
A veces por no estar organizados llevan útiles escolares que no necesitan, y esto provoca un aumento en el peso que cargan.
Forma de cargar la mochila:
*El niño debe cargar la mochila sobre ambos hombros para nivelar y distribuir mejor el peso.
*El niño debe levantar la mochila utilizando ambas manos.
*El centro de gravedad de la carga debe estar lo más cerca posible del cuerpo.
El tamaño y el peso:
*El tamaño debe estar acorde con la anatomía del niño.
*El ancho y el alto de la mochila no deben ser mayores al ancho y el alto de los hombros.
*El peso no debe superar el 10% del peso corporal del niño.
*Los objetos más pesados, como los libros grandes o las computadoras portátiles, deben ser empacados más cerca al cuerpo para reducir el estrés sobre la columna.
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