Cuando llega el Fin del Año escolar los padres, maestros, y educandos esperan tener buenas calificaciones, sin embargo para muchos este no es un momento de felicidad, sino de frustraciones, remordimientos por lo que hizo o dejo de hacer.
Cuando un niño (a) pierde el año escolar más que reclamarle hay que analizar las causas, los motivos por lo cual lo perdió y buscar soluciones para que el siguiente año escolar sea más productivo; lógicamente el niño (a) debe asumir su falta, es importante dialogar y buscar soluciones en conjunto (acortar el tiempo del Internet, ver menos TV, jugar menos con el play station, ect) y tomar un actitud positiva ante la educación.
Hay que valorar y analizar las causas por las cuales el niño (a) no esta rindiendo. No es sensato atribuirle la responsabilidad exclusivamente al colegio y/o al niño (a) hay que detectar ¿dónde esta el problema?
Es importante evaluar ¿cuáles son las dificultades académica y/o conductuales que el niño (a) presenta?
- Es recomendable analizar: ¿Cuáles y cuantas materias el niño (a) no aprobó?, si es la primera vez o si es reiterativo.
- Debemos observar el estado de salud general del estudiante, descartar dificultades físicas, (auditivas, visuales, alimenticias , entre otras).
- Valorar la capacidad de atención, retención, concentración y procesamiento de la información.
- Debemos evaluar la situación y relación familiar, la cual es importante, muchos fracasos tienen mucho que ver con la relación familiar, mala relación entre los padres, problemas económicos, enfermedad o pérdida de un ser querido, entre otros.
- Debemos evaluar y revisar el hábito de estudio, la falta de hábito y de supervisión por parte de los familiares, un ambiente inadecuado para estudiar pueden desmotivar al niño (a).
- Es importante tomar encuenta los cambios evolutivos como la adolescencia, problemas de autoestima, falta de motivación, problema de disciplina y por último criterios de evaluación demasiados estrictos.
La pregunta ¿Como puedo ayudarlo (a)? los castigos, insultos son contraproducentes y el niño (a) crea juicio de si mismo como un fracasado (a) lo cual hiere su autoestima dificultando el proceso para el año escolar próximo.
Les recomiendo que evalúe la calidad del proceso, a veces nos centramos en el resultado y en las calificaciones solamente.
- Haga una lista de las dificultades que tuvo el niño (a), reflexione con él sobre la situación y pregúntele su opinión al respecto.
- Concéntrese en buscar estrategias constructivas y viables.
- Hágale saber al niño (a) las exigencias y obligaciones que tiene. Las mismas no son negociables.
- Busque ayuda profesional, estos evalúan al educando y pueden hacer recomendaciones según la necesidad de su hijos (as).
- El próximo año escolar ayude a su hijo (a) con las tares escolares en el hogar, pregúntele acerca de las tareas todos los días, ayúdele a encontrar un lugar y un tiempo para estudiar, asegúrese que cada día se sepa la lección del día y que el (ella) pueda explicársela. Es importante que sienta que a usted le importa su trabajo escolar.
- Sea puntual a la hora de llevarlo al colegio, mantenga una buena comunicación con sus profesores (as).
- Es importante que tenga una dieta balanceada y que duerma bien todos los días.
- Sopese la situación, repetir puede ser una oportunidad para mejorar, pero no tome esto como un consuelo, es necesario aprender del error para mañana no volver a cometerlo.
Lo más importante es ver siempre las cosas de forma positiva, reprobar un año escolar no es una sentencia de fracaso, es un signo de que el niño (a) necesita ayuda y que debemos dársela, utilice la situación para entender más a su hijo (a), acérquese más a él o ella, apóyelo y aprenda amarlo (a) con sus fortaleza y debilidades, esté con él o ella en todo el proceso y ayúdelo a salir de esta dificultad con amor y paciencia.
La psicologa y educadora Virginia Pardilla es otra de las profesionales que nos ofrece su punto de vista sobre el tema de la repitencia escolar y cómo los padres deben manejar este momento de crisis.
Por: Virginia Pardilla.
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