Todo niño posee talentos únicos e intransferibles, al igual que sus huellas dactilares, es tarea de los padres propiciar el ambiente y motivarles a desarrollar sus capacidades naturales, pero ¿como hacerlo?
Cuando un niño alcanza la edad preescolar, dejando atrás la etapa de bebé, es el momento idóneo para potencias sus destrezas, habilidades y talentos. Para descubrir qué es lo que más le apasiona y en qué disciplina destaca lo primero que hay que hacer es observarlo.
Para luego iniciar a desarrollar sus cualidades artísticas, deportivas, propiciar el desarrollo de sus sentidos y capacidades motoras, pero una a la vez, “Muchos padres inscriben a los niños en clases de todas las disciplinas, van a clases de deportes, música, ballet, pintura, todas al mismo tiempo. Esta práctica en lugar de provocar afinación al niño por alguna disciplina, les provoca estrés”, explica la especialista en psicología, Vivian Fernández.
El talento es natural
Si observas a tu pequeño, conocerás que cosas les llaman la atención y en cuales es más diestro, “procura nunca, pero nunca presionarlo, y mostrarte orgulloso siempre, aunque los chiquitos no sean los primeros en las clases. Muchos padres cometen el error de exigirle a sus hijos que tienen que ser buenos en deportes, arte u otra disciplina, solo porque ellos de esa edad lo fueron, o lo son, no saben que el talento es natural e intrínsico de cada ser humano y no se hereda”, expresa la especialista.
Estimúlalo
Si bien es cierto que el talento es algo natural, también es muy cierto, que incentivar adecuadamente, recreando el ambiente permitirá impulsar el desarrollo de sus talentos.
Si ves que tu niño muestra una especial atención o interés por algunos estímulos, deporte, música, pintura, entre otras, procura realizar juntos alguna actividad para fomentar su aprendizaje. Por ejemplo, canta y baila con él para desarrollar sus habilidades musicales, llévalo a obras de teatro y musicales para niños, procura que conozca los instrumentos musicales en vivo.
Además, inscríbelo en alguna disciplina deportiva, fútbol, baseball, bici, natación, gimnasia o un programa que las incluya todas.
Es importante procurar que los niños desarrollen el área creativa, pero también hay que fomentar sus habilidades motrices, no se puede dejar de lado ninguno de los dos ámbitos. Si se fomenta la práctica de ejercicio en los niños, cuando sean mayores lo adoptaran como un hábito.
No te desesperes
Guiar a un pequeño hacia el conocimiento pleno de sus intereses personales, sus destrezas, habilidades físicas y mentales es una tarea que requiere tiempo, “ es importante que los padres no se desesperen en el proceso, pues conlleva tiempo, no es una tarea de un día, recomiendo a los padres a no desanimarse si el niño, no muestra un interés especial por ninguna disciplina concreta, porque no todos los niños están destinados a destacarse, e igual son felices si no alcanzan la fama”, exhorta Fernández.