El útero rasgado durante el parto puede poner la vida de la madre y el niño en peligro. Esa es la conclusión de un estudio realizado por la Universidad de Enory, en Atlanta, Estados Unidos y el famoso Instituto Karolinska de Estocolmo (Suecia).
Las mujeres sometidas a cesárea corren un riesgo 50 veces mayor de sufrir daños en el útero al tener un parto vaginal informó el estudio.
Nueve de cada mil madres que decidieron tener un hijo con parto normal después de haber sido sometidas anteriormente a una cesárea, arrojaron esa condición de riesgo, dice el estudio difundido por el International Journal of Obstetrics and Ginecology, la cual dio a conocer que en un estudio anterior también divulgado por esta, entre las mujeres sometidas anteriormente a cesárea, los desgarramientos del útero fueron de 0,18 casos entre mil.
Según la investigación, norteamericana y europea, 14 de 274 mujeres que sufrieron desgarradura en el útero, perdieron a sus bebés.
Para las mujeres operadas de cesárea y que optaron por parir de forma normal, constituyeron factores de riesgo de daño uterino la edad (más de 35 años) y la obesidad. Las mujeres obesas son más propensas a presentar complicaciones durante el parto que aquellas que tienen un peso normal.
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