Según la OMS los niños deben realizar un mínimo de 60 minutos diarios de actividad física.
Evidencias científicas demuestran que hay relación entre el aumento de peso y 3 horas o más de sedentarismo, según especialista.
En cuanto arrancan las vacaciones a los niños les sobra tiempo y los primeros que no saben qué hacer con este tiempo de ocio adicional son los padres. Por eso, un buen momento para incentivar que los niños realicen actividad física y crear un hábito saludable para toda la vida, es durante las vacaciones escolares.
Según el Centro para el Control y Prevención de Enfermedades en Estados Unidos (CDC), está comprobado que la actividad física puede ayudar a controlar el peso, a mejorar la autoestima y la capacidad de aprendizaje. Además, indican que ayuda a los niños a controlar el estrés, a desarrollar y mantener huesos, músculos y articulaciones saludables. Asimismo, mencionan que establecer estos hábitos a una temprana edad es necesario para que luego crezcan como adultos activos.
El médico colombiano Javier Gutiérrez, especialista en deporte, explicó que la actividad física es también una excelente herramienta no farmacológica que ayuda a disminuir patologías que están en aumento en los niños: el sobrepeso, la obesidad y la diabetes tipo 2. “Hace no más de una década estas enfermedades eran potestad de los adultos, el sobrepeso y la obesidad no sobrepasaba el 5% de los niños, hoy en día se ha triplicado fácilmente superando el 15-20%. En Colombia, para la población infantil de 5 a 17 años, la prevalencia de sobrepeso u obesidad para el 2010 es de 17,5% según la Encuesta Nacional de Nutrición de 2010”, agregó el especialista.
Actividades físicas varían entre niños y adolescentes
De acuerdo con el doctor Gutiérrez, la recomendación adoptada por la Organización Mundial de la Salud (OMS) es que los niños y adolescentes sanos de 5 a 17 años realicen un mínimo de 60 minutos diarios de actividad física moderada o vigorosa. De este tiempo su mayor parte debe estar dirigida a una actividad física aeróbica como caminar, correr o andar en bicicleta. Además, aconseja incorporar la actividad física de fortalecimiento óseo y muscular con ejercicios como push ups y saltar la cuerda, como mínimo 3 veces a la semana.
También, menciona que las actividades físicas recomendadas deben variar entre niños y adolescentes. Por ejemplo, según el CDC, los niños no suelen necesitar programas de fortalecimiento muscular, como levantar pesas porque por lo general fortalecen sus músculos cuando practican deportes como baloncesto, fútbol o trepan árboles, ellos requieren divertirse sin necesidad de un programa estructurado (entrenamiento formal) de cualquier disciplina deportiva. Cuando los niños crecen y se convierten en adolescentes, pueden iniciar programas estructurados de fortalecimiento óseo y muscular. Esto se logra particularmente con programas específicos en el gimnasio o con la práctica de fútbol o baloncesto, entre otras actividades.
Encontrar un balance entre actividades físicas y sedentarias
El doctor Gutiérrez agregó que “por naturaleza un niño es activo, le gusta jugar, moverse, saltar, correr. La falta de tiempo de los padres o adultos, el cansancio de los mismos, la violencia e inseguridad del medio encierran a los niños en los hogares y los llevan a aumentar el sedentarismo como ver televisión, jugar vídeo juegos o utilizar la computadora”.
Además mencionó que aproximadamente el 40% de los niños o adolescentes interrogados en la Encuesta Nacional de Nutrición de 2010 de Colombia utilizan más de 3 horas del tiempo libre en actividades sedentarias. Igualmente, agregó que existe evidencia científica que demuestra la relación entre el aumento de peso y más de 3 horas al día sedentarias.
Sin embargo, el doctor Gutiérrez indicó que no se trata de extremos ni de satanizar nada. Si un niño hace actividad física en el parque, o asiste a un entrenamiento de alguna disciplina deportiva, puede llegar a ver televisión o a jugar vídeo juegos. “Lo esencial es buscar el equilibrio entre actividades sedentarias y físicas”, añadió el especialista.
El rol de los padres: dar el ejemplo
De acuerdo con el CDC, una de las mejores maneras para incentivar la actividad física en los niños es que los padres sean el ejemplo y lleven una vida activa y saludable. Recomienda hacer de la actividad física una parte de la rutina diaria de la familia y llevar a los hijos a lugares donde pueden ser activos, como parques, canchas de baloncesto o fútbol.
Además, aconseja mantener siempre una actitud positiva acerca de las actividades físicas en las que participan los niños, animarles a estar interesados ??en nuevas actividades sobre todo aquellas que disfruten. Según el doctor Gutiérrez, actividades divertidas pueden ser cualquier cosa que su hijo disfrute, ya sea estructurada o no estructurada. Las actividades pueden ir desde los deportes de equipo o los deportes individuales hasta las actividades recreativas, tales como caminar, correr, patinar, andar en bicicleta o natación.
Por: Dr. Jose Gutiérrez , Deportologo, Colombiano