Hoy 8 de marzo en todas las naciones se celebra el Día Internacional de la Mujer, fecha en la que todos los continentes, se unen para celebrar los esfuerzos que se han realizado, para que la mujer alcance la igualdad, la justicia, la paz y el desarrollo.
La idea de celebrar un día internacional de la mujer surgió al final del siglo XIX, la razón para elegir este día va en relación a varios sucesos que ocurrieron por esa fecha; uno de ellos es el de un grupo de costureras de Nueva York, en el año de 1857 apoyadas por su sindicato, decidieron ocupar la fábrica textil en donde laboraban, para exigir igualdad de salarios y una jornada de trabajo de 10 horas; lamentablemente este movimiento terminó con un incendio en el muchas murieron y otras más resultaron heridas.
Diversas protestas realizadas por mujeres y su participación continua en los grandes foros, permitieron que en 1977 la Asamblea General de las Naciones Unidas, declaró como oficial el día 8 de marzo
Y aunque en todos los países en esta fecha se celebre el día internacional de la mujer, soy partidaria de que cada día debe ser día de la mujer.
Comparto el pensamiento del periodista José Enrique Centén Martín, cuando dice que “la mujer aún no es equiparada en igualdad con el hombre por un mismo trabajo, a veces es menospreciada, y doblemente explotada. Sin embargo sigue siendo madre, siempre venturosa, espléndida, cariñosa, sabía como siempre, pero nos creemos superiores y te olvidamos”.
Solo te recordamos en fecha especial, esta es una invitación para que cada día celebremos y honremos la esencia de amor, de la unicidad, la fortaleza, de cada mujer que tenemos alrededor.
Demos gracias por ellas y enseñemos a nuestros hijos a valorar a sus maestras, abuelas, vecinas, a la joven del servicio, por ser mujeres que forjan, mujeres precursoras y pioneras. Aquellas que nos dedican su tiempo y esfuerzo.
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